El gobierno de Chile se ha mostrado preocupado por la decisión del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela que confirmó la inhabilitación de María Corina Machado para ocupar cargos públicos durante 15 años.
La Cancillería chilena rechazó la situación que afecta a líderes políticos de la oposición venezolana que podrían verse impedidos de participar en las próximas elecciones presidenciales de ese país.
Además, el gobierno de Gabriel Boric apoyó la propuesta de Noruega de conformar a la mayor brevedad una comisión de seguimiento y verificación de los Acuerdos de Barbados, que se centran en garantizar un proceso de elecciones abiertas, democráticas y transparentes.
Panamá también se mostró preocupada por la situación en Venezuela y pidió a Nicolás Maduro que se propicien las condiciones para elecciones presidenciales libres, transparentes y con la más amplia participación de los venezolanos.
Ambos gobiernos destacaron la importancia de garantizar el bienestar de los venezolanos y la estabilidad social de su país.
Francia sumada
En un comunicado, la Cancillería francesa expresó la preocupación del presidente Emmanuel Macron por las recientes decisiones del TSJ que confirmaron la inelegibilidad de varias figuras políticas venezolanas.
Francia pidió el respeto y la plena aplicación del Acuerdo de Barbados del 17 de octubre de 2023 sobre derechos políticos y garantías electorales, celebrado entre el gobierno y la Plataforma Unitaria Democrática, para que las elecciones presidenciales del segundo semestre de 2024 puedan ser libres y transparentes.
El gobierno de Macron destacó que el Acuerdo constituye un paso importante hacia el fin de la crisis que padece Venezuela.
Francia reiteró su voluntad de colaborar, a través de la Unión Europea, en una misión internacional de observación electoral, prevista en el Acuerdo de Barbados.
