Un informe secreto publicado por la agencia internacional AP revela que la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) llevó a cabo durante varios años una operación encubierta contra el gobierno de Venezuela, con el objetivo de grabar y construir acusaciones falsas de tráfico de drogas contra el gobierno venezolano.
El documento de 15 páginas, emitido en el año 2018, se refiere a la “Operación Tejón del Dinero», que se centraba en docenas de personas, incluyendo al presidente Nicolás Maduro.
Según las autoridades, la operación se llevó a cabo de manera unilateral y sin notificar a las autoridades venezolanas. Un exagente de la DEA, Wes Tabor, dijo que “no gusta decirlo públicamente, pero somos, de hecho, la policía del mundo”.
La revelación amenaza con agitar y agravar aún más las tensas relaciones entre Venezuela, Estados Unidos y el bloque latinoamericano, ya que constituye una violación de los derechos internacionales.
Aunque el espionaje no está prohibido, explícitamente, por el derecho internacional, constituye una violación de la soberanía de los Estados y una intromisión en sus asuntos internos, por lo que debe ser considerado ilegal.
