En el Líbano, una nueva ola de explosiones de dispositivos electrónicos se registró este miércoles, matando a 9 personas y heriendo a más de 300.
Según la Agencia Nacional de Noticias, citada por Al Jazeera, las explosiones ocurrieron en la ciudad de Sohmor, en el valle de Bekaa, y se cree que fueron causadas por dispositivos inalámbricos no identificados.
Se presume que Israel habría hecho estallar miles de radios personales bidireccionales utilizadas por Hezbolá, un grupo chiita, como parte de una segunda ola de operaciones de inteligencia.
De acuerdo a dos fuentes con conocimiento del asunto entrevistadas por Axios, las trampas explosivas fueron colocadas en los “walkie-talkies” por los servicios de inteligencia israelíes y luego entregados a Hezbolá como parte del sistema de comunicaciones de emergencia de la milicia.
Las explosiones ocurrieron durante el funeral del hijo de un representante de Hezbolá, víctima de los ataques del día anterior. Las personas consultadas explicaron que las detonaciones ocurrieron en radios transportadas por miembros de la agrupación chiita, algunas de las cuales se encontraban en edificios residenciales.
Además, varias radios portátiles de miembros de Hezbolá detonaron en diferentes puntos del país, reportó Reuters citando testigos y a una fuente de seguridad.
Los medios locales informaron que se escucharon varias explosiones principalmente en el suburbio Dahiyeh de la capital, Beirut.
En varios videos publicados en las redes sociales se pueden ver múltiples coches y apartamentos en llamas.
El suceso ocurre un día después de que una oleada de explosiones de dispositivos localizadores (buscapersonas o “beepers”) pertenecientes al grupo chiita Hezbolá se registraran en el territorio libanés, incluidos los suburbios del sur de Beirut, el valle de Bekaa y el sur del Líbano.
Al menos 11 personas han muerto, entre ellas una niña, y 4.000 han resultado heridos por las explosiones, comunicó el Ministerio de Salud del Líbano.
El embajador de Irán en el Líbano, Mojtabá Amaní, ha resultado levemente herido pero está consciente y no se encuentra en condición grave.
Con información de medios internacionales